Toxina Botulínica
La aplicación de la toxina botulínica en los músculos que hacen parte de la masticación es uno de los tratamientos más eficientes cuándo el paciente presenta dolor facial, dolor de cabeza y/o cuello por múltiples causas entre ellas y la más común es el bruxismo que a su vez causa desgaste dental irreversible y genera problemas funcionales y estéticos importantes y progresivos. La toxina botulínica tipo A, se trata de un medicamento biológico apto para la aplicación debajo de la piel, favoreciendo la relajación muscular por un tiempo determinado; ayudando de forma terapéutica a trastornos de tipo funcional como por ejemplo el bruxismo y las alteraciones musculares entre otras.